The Knife es una banda sueca de electrónica y en el vídeo que les muestro una
serie de hombres, de diferentes edades y condiciones, se cambian en el vestuario.
Cuando salen al pabellón, ante su sorpresa (quizás no tanta -sus caras lo
reflejan vagamente pero incluso alguno parece alegrarse-), comprueban que una niña
hará de instructora. Pero se liberan y danzan aleccionados por ella,
subvirtiendo las jerarquías tradicionales. Es probable que después se sientan
mejores personas.
A Toni Nadal le
recomendaría que lo viese y lo disfrutase relajado.
Sus palabras tras la decisión de elegir a una mujer, Gala León, como capitana
de la Copa Davis, han traído polémica. Admiro su trabajo como entrenador de su
sobrino Rafael Nadal, pero no comparto algunas de sus apreciaciones. Si fueran
cuestiones técnicas tendría poco que decir pero, desde que comenta,
"también es una dificultad logística difícil de solventar, cuando tú en
Davis te pasas mucho tiempo en el vestuario con poca ropa y una mujer no deja
de ser extraño que esté dentro (...). A mí me gustan las cosas lo más simples
posibles y entiendo que es más fácil que el capitán sea un hombre", desde
ese momento me siento impelido a opinar.
Suenan a palabras de otra época. Infinidad de equipos y selecciones
femeninas son entrenadas por hombres y nadie pone el grito en el cielo
(incluyendo hombres que entrenan a mujeres tenistas). Es más, lo vemos como
algo normal. Presuponemos que dentro del vestuario rigen unas normas de
educación y cortesía y que el respeto es sagrado. Por otra parte, no creo que
una mujer se asustara por ver el torso desnudo de un hombre, más bien es el hombre
el que se asusta al ver el torso desnudo de una mujer.
En Suecia, en los gimnasios y recintos deportivos, existen los
vestuarios femeninos, masculinos y mixtos. Los mixtos son utilizados por las
familias sobre todo. No tienen ningún problema por ello. Es más, normalizan la
situación desde la infancia. Reflexionando sobre las palabras de Toni
Nadal tiré de hemeroteca y recordé que yo mismo he utilizado vestuarios mixtos
(en alguno de los festivales musicales a los que he asistido). Concretamente eran
duchas en módulos prefabricados. Usas las normas mínimas de corrección que ya
sueles utilizar en cualquier vestuario y charlas distendidamente con ambos
sexos mientras haces cola. Me pareció lo más normal del mundo. Y no
pasa nada.
Previamente a las palabras citadas, Toni Nadal había dicho "que no
se me malinterprete, porque no tengo nada contra que haya una mujer dirigiendo
a un jugador pero...", y ya luego soltó el resto. En la práctica viene a
ser como decir "no soy racista pero... no me traigas negros a casa".
O "no soy machista pero... según que casos hay que tomar medidas".
Luego se defendió: "Si alguien quiere hacer demagogia de mis palabras,
puede hacerla". No es demagogia, sus palabras tienen eco y debe medirlas.
Es probable que ni el mismo Toni lo sepa, o crea que no lo es
(ocurre con cierta frecuencia), pero en sus palabras subyace un machismo
atávico. Incluso creo percibir influencias de la tradición católica porque
mezcla el recato. Ya saben, puritanismo. El jugador Fernando Verdasco lo
secundó. Dijo: "Siempre que se pueda, debe ser un hombre". Si lo
piensan y aplican la lógica equivale a decir que nunca podrá ser una mujer
(siempre será posible conseguir a un hombre para el puesto). O sea, más
machismo (implícito). No sabemos si se atrevió a decirlo por iniciativa propia,
o espoleado por las palabras de Toni Nadal, pero es indudable que también
esconde un machista dentro.
Considero que es un órdago lo que está lanzando un sector del tenis
masculino español. Y creo que la única opción que le queda a la Federación de
Tenis es seguir adelante y poner a Gala como capitana. Es lo razonable porque
su decisión modernizadora y normalizadora conllevaba resistencia de los más
reaccionarios. Así que ahora no hay vuelta atrás. Cualquier retroceso es signo
de debilidad. Es una buena noticia por parte de la Federación de Tenis: es la
modernización de la sociedad aplicada al deporte, o quizás es el deporte
tirando de la sociedad rompiendo viejos estigmas. Que cunda el ejemplo.
La capitanía del equipo de la Copa Davis siempre ha traído polémica.
Curioso deporte el tenis, en lo que a la Copa Davis se refiere. En la mayoría
de deportes se respetan las jerarquías pero en este caso todos los años
escuchamos a los jugadores con la misma cantinela: comentarios del tipo "pero
no me consultaron..."; "no reúne los méritos suficientes...";
"se lo merecía tal persona...". Además, la importancia del capitán en
tenis es relativa (repito, en la Copa Davis). Personalmente me aburre el
repetitivo asunto. Debería imperar una lógica más receptiva y gremial. La
polémica es consustancial al equipo masculino de Copa Davis pero en este caso
ha traspasado los cauces deportivos auspiciado por protagonistas con imagen
pública que son idolatrados. Es algo que no debemos permitir. O por lo menos debemos
contrarrestar.
Vuelvo por el principio. A Toni Nadal, y a todo el que crea en la
igualdad (o quiera creer), le recomiendo este vídeo musical. Es un dúo sueco
(hombre y mujer), se llaman The Knife y la canción se llama A Tooth For An Eye.
No hay comentarios:
Publicar un comentario